Las verdulerías saben defenderse. Y tienen que querer

Las nuevas verdulerías han entrado con fuerza y diseño, con color y espacio, con autoservicio y gran variedad de productos, para provocar un aumento del consumo a precios aceptables. Hoy en los barrios vemos nuevas verdulerías (en mi calla han abierto cinco en un año), a veces regentadas por personas que han llegado desde otros países y que cada vez tienen más variedad y mejores servicios. Sean productos de temporada o no. 

¿Y qué les queda por hacer a las verdulerías de toda la vida para defenderse de esta competencia? Pues sin duda dar calidad.

Hay un camino por explorar de forma amplia y es el de productos de proximidad. Verduras y frutas de temporada y de lugares cercanos. Hay que indicar (y no engañar) el lugar de procedencia de los productos, y hay que dar calidad y sabor. Si son capaces de ar sabores de siempre, productos ecológicos, de proximidad, de zonas reconocidas, les será mucho más sencillo defenderse ante la creciente competencia. El consumidor está dispuesto (a veces) a pagar algo de más si el producto lo merece. Hay que explorar esta posibilidad.