Precios de los hoteles y menú del día en la Barcelona de 1931


En el año 1931 estos eran los precios de los hoteles medianos en la ciudad de Barcelona y el precio de las comidas en los restaurantes de estos mismos establecimientos. En el Hotel Beausejour el cubierto del Día salía por 5 pesetas, y en la Pensión Frascati por 3,50 pesetas en cubierto. Incluso la pensión tenía habitaciones con baños en alguna de ellas. Y a los que portaban el anuncio les hacían un 10% de descuento. Curiosidades de hace un siglo.

Paella valenciana. Grosor y presentación


La semana pasada tomamos para dos personas la paella valenciana que vemos en la imagen en un restaurante conocido de Valencia. Como pagamos gentilmente, no voy a explicar ni el nombre ni su ubicación, como es lógico. Habíamos solicitado una pella valenciana de encargo el día de antes, y la preferimos lo más valenciana posible. Para que no hubiera dudas.

El servicio fue muy correcto, y al presentarla nos asustamos literalmente. ¿Toda esta paella para nosotros dos? Y efectivamente, como nos dijo el camarero, no era para tanto, pues el grosor de la paella final era muy poquito, delgadísimo. Y eso es un detalle del que tenemos que tomar nota. Las paelleras son tan grandes porque el arroz debe cubrir la paellera en un par de granos de grosor, y poco más. 

Judiones o garrafones, judías verdes, conejo y pollo. Un buen caldo de base, un refrito muy correcto con tomate, pero una paella acabada al horno, algo que a mi personalmente no me encajó bien. 

Luego me he enterado que sí, que se suele terminar en el horno… en los restaurante, y que no siempre debe estar encima del fuego, sino que puede estar por debajo.

Yo conocía los arroces al horno valencianos, maravillosos arroces con garbanzos y patata incluida, con morcilla y chorizo sin que nadie se rasgue las vestiduras, y que están para morir de gusto. Pero una paella pensaba que siempre se hacía sobre el fuego.

El sabor era bueno, no excelente, pero si correcto, tal vez con el arroz un poco tieso, faltándole un poco más de caldo para un par de minutos más al fuego. Pero tampoco el precio era muy elevado. El de la paella.

El de los añadidos me pareció excesivo. Desde unas croquetas de cocido malas, de entrada aunque muy bonitas en su presentación, a un excelente vino rosado valenciano pero tal vez un poco pasado de precio. 

Yo hubiera cambiado algunas judías verdes por algo más de conejo, pero esa es otra cosa. El resultado fue positivo, pero sin fuegos artificiales. Bueno de sabor, pero sin sorprender. Yo, que soy muy arrocero y fabricante de paellas y arroces con muy variadas cosas, supe en esta jornada que mis arroces son muy buenos.

¿Qué es el Zumo hecho a partir de concentrados?


Igual tendríamos que ir aprendiendo a cuidar nuestros dineros, a saber mejor en qué los gastamos, a quién se los damos. Son NUESTROS DINEROS ganados por trabajar, pero en cambio muchas veces los regalamos. Ya, lo sé, algunas cosas jode que se digan estas cosas, como cuando un señor mayor Jefe en Europa, nos dice que si gastamos mucho Gas doméstico en calor, se lo estamos dando a Rusia para comprar cohetes. Y sí, eso jode.

Veamos estos dos zumos de naranja —¿Zumos ambos?, pues si— y de parecido precio. Uno es un Zumo de naranja a base de concentrado con añadido de vitamina C, no sabemos qué es lo que ha intervenido para hacer el zumo. Y menos mal, que no es Nectar, que esa es otra y son la mayoría, también a los mismos precios. El otro es un zumo de verdad, exprimido de naranjas aunque tampoco sabemos de donde vienen esas naranjas.

Los zumos concentrado hechos en procesos de concentración (eliminación del agua, alrededor del 85 % de agua se elimina del zumo), se suelen realizar bajo condiciones de presión y temperaturas que eviten dañar en todo lo posible al zumo, y mantener sus características. A ese zumo concentrado se la puede añadir pulpa, aromas, espesantes, hasta optener un producto muy espeso que es el que se utiliza para luego hacer zumo añadiendo agua.

Una vez concentrado se suele refrigerar o congelar. Ante esto, nos debemos de preguntar ¿para qué se concentra el zumo y luego se vuelve a añadir el agua? Se elimina el agua, para concentrase el zumo y así evitar almacenar y/o transportar agua, posteriormente en destino se añade el agua y listo. Es una técnica que se emplea para transportar zumo desde lugares donde la fruta y/o la mano de obra son más baratas, en el caso del zumo de naranja una gran parte del concentrado procede de Brasil y Estados Unidos hasta destinos donde le aportan el valor añadido (envase y publicidad).

Lo curioso es que en la caja de ese zumo concentrado no tiene que poder de donde viene el producto primitivo, sino en donde se logra convertir en zumo aquel concentrado espeso y posiblemente congelado o refrigerado. Como a perdido todas las vitaminas se le puede añadir por ejemplo Vitamina C, y así disimular.

Y lo más curioso es que puede ser sacado de naranjos de Brasil, de India o de Argentina, pero si se encaja, es decir se termina de fabricar en España, se puede poner que viene de Murcia, de Almería o de Madrid. ¿Y eso es legal? Claro, faltaría más, en realidad lo que compras se fabrica en España, y solo tienen obligación de decir que es un Zumo a partir de concentrado. Eres tú y tu dinero quien tiene que saberlo. Incluso como se modifica el producto en su elaboración para hacer el concentrado, puede llevar el mismo grado de hidratos de carbono, de azúcar o de proteínas, para que silo comparas veas que es my similar. por eso se le añade Vitamina C, pues la pierde en su elaboración.

Entremeses o aperitivos del Mercadona. Sencillos y fáciles de presentar


A veces preparar unos entremeses o aperitivos diferentes es tan sencillo como ir al Mercadona y comprar cuatro cositas de nada. Mezclar sabores, colores y texturas es el éxito. Aquí vemos elementos de Mercadona muy sencillo, y muy fáciles de preparar. Veamos cada uno de ellos.

Una lata de hígado de bacalao, que si no lo has tomado nunca te parecerá un descubrimiento. Y si tu comensal no lo ha probado, no sabrá lo que le ofreces. Muy interesante.

Unas rodajas de tomate madura con unas rodajitas de piña en conserva por encima. el ligero dulzor de la piña junto al ácido del tomate encajan muy bien.

Un poco de queso francés tipo Brie o Camembert cortado en una lámina, para dar otra textura.

Un pimiento del piquillo en conserva, pasado un punto por una sartén con un ligero toque de ajo frito.

Y para completa cuatro elementos de una bandeja de comida japonesa que vende el propio Mercadona, y que da para tres personas. Colores, sabores diferentes, sano, sencillo y rápido. Y casi barato. 

Un buen vino rosado fresco, de Calatayud, de Somontano o de Navarra, y a disfrutar.


Garbanzos con bacalao, espinacas y Cuaresma


En Cuaresma es normal ciertos platos muy históricos, antiguos cuando menos, sin carne, que se repiten año tras año en muchos hogares españoles sobre todo si hay personas mayores que los recuerdan de niños. Uno de estos platos son los garbanzos con bacalao y espinacas. Hoy es posible hacerlo de forma rápida y muy sencilla, en este caso vamos a partir de un bote de cristal de garbanzos ya cocidos.

En una olla y sobre una cucharada sopera de aceite de oliva vamos a refreír dos dientes de ajos picados a láminas. Cuando tomen color añadiremos un puñado de espinacas frescas picadas a trozo, como unas 20 hojas de espinacas para un bote de garbanzos. 

En un instante quedan refritas las espinacas y en ese momento añades un par de vasos de agua para que todo cueza unos dos minutos. Añades sal y una pastilla de caldo de pescado para reforzar los sabores.

Pasados esos 2 minutos añades un puñadito de arroz y una cucharada mediana de tomate frito para darle color a todo. Dejas cocer todo 5 minutos y añades el bote de garbanzos ya cocidos con su propio caldo de la conserva.

Dejas cocer todo 10 minutos y transcurrido ese tiempo añades bacalao desmigado y ya desalado del día de antes con agua que vas cambiando tantas veces como sea necesario según el tamaño del bacalao. Para el boto de garbanzos puedes añadirle como un puñado de bacalao desalado o dos puñados, según lo que tengas y las ganas de que haya más o menos pescado. 

Dejar hervir todo un minuto más y apagas el fuego. El arroz ha cocido en total unos 16 minutos, más o menos, que unido al tiempo que ahora dejamos de reposo, es más que suficiente. Algo menos también es correcto.

Lo dejas reposar un par de horas y a servir. Una variante podría ser añadir junto al tomate un par de cucharadas de nata de cocinar o de leche, pero eso depende de gustos. También le encaja unos golpes de pimienta recién molida. Servir muy caliente.

Personalmente me gustan con caldo, pero eso depende de comensales y gustos. Se puede hacer desde casi secos, a caldosos o a un puchero con bastante caldo. Los garbanzos siempre tienen que ser más del doble que el arroz. Y es un plato único con algunos pequeños aperitivos anteriores, por ejemplo unos encurtidos o unas gambas cocidas o a la plancha.

Nota.: La imagen no hace justicia, pues la hice cuando ya nos los habíamos trajinado casi del todo, y es una pequeña muestra del plato de garbanzos con bacalao y espinacas.

Ramo de Frutas para una celebración


Hoy hacía 48 años de algo muy importante para nosotros, así que a los hijos les ha tocado mojarse un poco. No me gustan los ramos de flores muertas, prefiero las macetas, pero hoy nos han regalado este centro de frutas a modo de ramo de flores pero que se pueden comer pues son frutas variadas bien puestas.

Piña, melón, naranja, fresas, uvas, kiwi y una base de lechugas para decorar han logrado un ejemplo de que el buen gusto tiene camino por recorrer.

Las frutas pueden (suelen) ir revestidas de chocolate pero en este caso por problemas con alguna intolerancia de un comensal no ha sido con chocolate, sino solo frutas. Un buen ejemplo de postre natural que preparan en Zaragoza en la Plaza San Felipe.