Cena de buffet en un hotel catalán de playa

Hoy tenía cena de esas de buffet en un gran hotel catalán. Bien. Es lugar conocido y no me engaña por el precio y el servicio. Guarda buena relación. Pero no sé qué opinarán los numerosos extranjeros que llenan el comedor. No se puede pedir nada más por lo que se paga, así que me imagino que también ellos lo entenderán.

Un poco de ensaladilla rusa muy correcta. Otro poco de salpicón de mariscos justo aprobado. Unos trozos de bróculi y col de flor en salsa de queso, bien. Un rape muy pequeño en salsa americana con mejillones y cigalitas. Tres pasteles de repostería tras una tajada de sandía han cerrado la copiosa cena regada con un Blanco Pescador en su punto.

Como leemos, la cena ha tenido que dejar encantados a los turistas. Pero cuidado, también había merluza congelada de esas embutidas, tortilla de patata seca, sopa marrón, puré de patata o tallarines blancos con queso. Es decir, se puede elegir entre lo bueno y lo regular o malo, dependiendo de lo que conoces de nuestra gastronomía. Curiosamente las patatas fritas congeladas estaban de chuparse los dedos, cosa curiosa. Sobre todo si le añadías por encima un poco de la salsa americana del rape.

Cómo convertir carne de cerdo en jabalí

Desde hace muchas décadas ya algunos desaprensivos querían dar gato por liebre y en este mismo campo, dar cerdo por jabalí, que hace un siglo no era una carne tan fácil de conseguir como ahora, aunque todo hay que decirlo, con el consumo desaforado en embutidos, nunca se sabe bien qué comemos en verdad.

El caso es que algunos listos saben convertir al cerdo en jabalí poniendo las carnes en un adobo que os relato.

En un barreño de unos cuatro litros de agua añadimos medio litro de vinagre fuerte del casero, media docena de hojas de laurel, una veintena de granos de pimienta negra, una docena de bayas de ginebra, un puñado de tomillo, otro de salvia y de melilote, una cucharada sopera de drupa que es la cáscara verde de la nuez y otra sopera de sal. En este caldo ponemos la carne de cerdo recién muerto y troceada en medianas piezas. Se deja macerar entre 3 a 5 días y al cabo de ese tiempo hemos logrado el milagro de convertir al cerdo en jabalí, tanto en color de la carne como en sabor a campo de la misma. Lista para ser guisada o pasar por las brasas.

La imagen es de: http://cazawonke.com

Potaje de Jamón Arimón, de garbanzos y col

Vamos a presentar un plato de guiso o cuchara de lo más barato y que ya tiene unas cuantas décadas sobre sus espaldas. Lo llamaremos Potaje de Jamón Arimón, como hace El Practicón, libro de cocina con más de un siglo funcionando por las cocinas antiguas.

En una sartén con una cucharada sopera de aceite de otros fritos, pondremos una cucharada sopera de cebolla finamente picada y otra cucharada sopera de jamón de canilla cortadito a tacos pequeños. Cuando la cebolla empiece a volverse transparente añadiremos una cucharadita de harina a freír para darle cuerpo al plato cuando lo pongamos a cocer. En cuanto la harina empiece a tomar color añadiremos medio litro de agua con una pastilla de caldo y picaremos un puñado de repollo en trozos pequeños que añadiremos al caldo.
 
Cuando lleve unos 15 minutos de cocción le añadiremos un bote de cristal de garbanzos cocidos y lo dejaremos cocer todo otros quince minutos como máximo, rectificaremos de sal pues el jamón no será suficiente y le daremos un pequeño golpe de pimienta blanca molida.

Carta del restaurante 5 Jotas de Barcelona

Es una carta de un restaurante de cadena, el 5 Jotas, pero muy bien servido y a un precio muy aceptable. En este caso es de Barcelona y nos puede servir de ejemplo para tomar nota. Una celebración, un pequeño buffet casero, una fiesta con amigos. Sobre todo en el apartado de “Para Picar” seguro que encontramos ideas que a poco que nos manejemos en la cocina, nos pueden servir para preparar unos platos variados y simpáticos.