Menú peregrino de Asís a Compostela, del Parador de Lerma

Hoy vamos a dejar un menú del Parador de Lerma de la Castilla la Vieja que ha ido transformándose en una mezcla donde también cabe ahora León, para cabreo de las gentes del Reino de León que se ven desplazadas de sus cuidados territoriales e históricos. Pero esa es otra, y ahora no toca.

Un Menú del Peregrino que llaman De Así a Compostela y que por un precio de 39 euros te ofrecen una degustación de los platos de la compostelana más que de la castellana vieja.

Un chipirón encebollado en pan, que ya hemos visto servir también y muy bien en el Parador de León.
Un lomo de jurel escabechado.
Unas vieiras y mejillones con un poco de puerro junto a un pan de almendras.

Una merluza en potaje de garbanzos y espinacas para entonar.
Un canelón de gallina de corral con setas, un poco de trufa y unos brotes verdes.

Tarta semilíquida de Santiago. Muy acertada y Rocas del Camino.

Vinos gallegos y junto al café que va fuera del menú un orujo gallego para la sobremesa.

¿Qué marcas y tipos de vino español se pueden comprar en Reino Unido?

Esta imagen es de un buen supermercado de la ciudad de Birmingham en Reino Unido mostrando una selección de los vinos españoles que se venden allí. Menos de los que uno espera por la calidad del vino español, y con algunas lagunas importantes. La competencia de los vinos chilenos, australianaos o sudafricanos es tremenda.

Estos vinos que muestro son de la zona de los vinos buenos pues a pocos metros estaban expuestos los vinos baratos españoles, todos de marcas perfectamente desconocidas, es decir, posiblemente graneles embotellados con nombres tan simpáticos como Toque virtuoso blanco, Las Falleras blanco o Raso de la Cruz tinto. Cada botella a 7 libras, unos 9 euros la botella.

No muestro aquí los Jerez que sí estaban en un numero suficiente como para saborear todas esas delicias andaluzas, desde las manzanillas, los amontillados, etc. Solo los vinos de mesa que pueden competir con los de otros países, aunque en muhco menor número de botellas y marcas expuestas. Los Rioja, todo hay que decirlo, si que parecen tener un respeto mucho mayor que el resto de vinos españoles.

Vayamos a la imagen.
Un Tobía crianza por 19 euros.
Un Izadi reserva por casi 14 euros.
Un Montecastro 2008 de Ribera del Duero por casi 38 euros
Un Marqués de Arienzo reserva por 20 euros.
Un Pirineos Moristel de Somontano por 12 euros.
Un Solanes del Priorato por 35 euros.
Un Roda 2007 de Rioja por 69 euros.
Un Cien y pico de La Mancha por 21 euros.
O un Spiga de Ribera del Duero por 38 euros.

Vinos en algunos casos de complicada compra en España y en todos ellos de un precio bastante superior al que se puede encontrar en nuestras tiendas. Son los que son, y si no son otros es por que España no sabe vender bien sus productos o por que los exporta hacia otras zonas u otro tipo de distribuidor, que entiende más de vino español.

Hablemos algo de los sabores en la cocina de India

Vamos a poner los dientes largos a más de uno con estos productos de la cocina de India, de la gastronomía más sencilla y menos conocida en España, con una mezcla de productos de India y de Reino Unido. Hay que avisar que los platos que se vende en Inglaterra como cocina de la India no siempre son platos perfectos, como nos sucede en España con los restaurantes chinos. Pero en ambos casos son sabores diferentes, unos más que otros, y que debemos conocer.

Las samosas son pequeños pastelitos rellenos de carne de pollo, cordero o ternera, con curry de distinta intensidad y por ello más o menos picante. Las hay de distinto tamaño, sabor, componente principal y sobre todo tipo y cantidad del ingrediente picante, por lo que siempre hay que enterarse si estamos preparados para su degustación. Cuidado que algunos pican de verdad.

Los pie son simplemente pasteles cilíndricos de hojaldre, rellenos de verduras o de carne, también de distinto tamaño, pues aquí los que vemos son pequeños pero en los restaurantes te sirven algunos de tamaño considerable. El último que he probado era de champiñones con castañas que estaba delicioso. El interior del pastel debe ser carne o verduras que resulten jugosas, cocinadas dentro de una salsa potente.

En la cocina hindú también se toma mucho las verduras asadas y luego fritas o simplemente fritas, maceradas o no, envueltas en rebozados diversos, hasta lograr un producto diferente a lo que conocemos. En la imagen vemos unas cebollas, pero se hacen verduras como si fueran en tempura pero con sabores que entrega el rebozado mucho más contundentes que en la cocina de Japón.

En España no es sencillo conocer la gastronomía de la India y probar sus platos, sus productos y sus muy diversos curry, que son capaces de lograr platos no muy fuertes y de sabores totalmente distintos a nuestro paladar.

Comida especial y premios para animales de compañía - Special food and treats for dogs

También los animales de compañía tiene variedad de alimentos, si sus dueños quieren darles caprichos y los perros son los que disponen de un catálogo de premios en su comida que casi parece un inventario inmenso de posibilidades para premiar a los perros. 

En algunos mercadillos de calle de ciudades europeas, las posibilidades son para todos los tamaños de perro, todos los gustos, todos los precios. Desde piensos pequeños de muy variada mezcla hasta canillas de jamón repelado para que los perros grandes se entretengan mordiendo. Imitaciones de huesos empleando piel natural o mezclas de piensos compuestos que simulan caramelos. Orejas secas de cerdo a patas secas de corderos. Pequeños bombones dulces o zapatillas cosidas de piel natural.

Chocolate aéreo, lleno de burbujas de menta y de Nestlé - Air Chocolate, mint bubbly and Nestlé

Estos días he estado probando este chocolate de la imagen. Digo probando para no decir la verdad. Me he viciado hasta que se acabaron los paquetes comprados.

Es un chocolate de Nestlé que he encontrado en Reino Unido, relleno de una crema esponjosa de pipermín y que estaba maravilloso. Se dejaba en la boca para que el calor deshiciera el chocolate, dejando la masa de la menta como una esponja llena de burbujas que poco a poco inundaba de sabor la boca. Excelente chocolate.

Pero sobre todo si lo traigo aquí es por su precio. Esta imagen es de un supermercado donde vendían a 2,55 libras la tableta. Yo lo compraba en un Spar del centro de la ciudad de Birmingham a 1 libra. ¿Tanta diferencia? Pues sí. Tanta y tanto.

Carne de NO pollo que era harina de trigo con sabor a pollo

Uno probando sabores nuevos a veces se sorprende negativamente aunque muchas otras veces de forma positiva. Todo sea por conocer lo que se come en otros países, en otras sociedades. Y alabar lo bien que comemos en la nuestra, más si es la occidental, donde todo se cuida mucho más que en otras. 

Pero ojo con caer en modas que son de todo menos de calidad gastronómica. Una cosa es comer y otra alimentarse.

Ayer compré en una tienda oriental una lata de conserva de carne guisada de pollo. O al menos eso pensé al ver con mi escaso inglés que ponía pollo (chicken) en la lata. Entendí con la imagen que era pollo con verduras, cuando en realidad era pollo vegetariano, es decir gluten de harina de trigo con sabor a pollo. 

Carne vegetariana realizada con harina y a la que añaden soja para darle color y sabor. Sal, azúcar, agua y un poco de salsa de judías cocidas para completar el ataque a la gastronomía.

El sabor es asqueroso, pero la textura de la carne es tremenda. Efectivamente era una lata de comida china comprada en una cara tienda oriental, pero que anuncia en su etiqueta y casi como amenaza que ha recibido premios. El precio no tiene nada que ver con el resultado, todo hay que decirlo.

La textura del producto tiene bemoles. Es como comerse una esponja o en el peor de los casos y hasta que lees bien la etiqueta, como carne que lleva tantos años en el caldo que se ha vuelto como un plástico podrido nadando entre sopa con sabor a piel de pollo cocido. Con perdón por la impresión personal, pues no soy un experto en carne vegetariana. 

No la recomiendo más que para veganos convencidos, y en estos casos, seguro que ellos conocer muchas más posibilidades para no salir huyendo.

Algas fritas chinas o verduras fritas al estilo chino

Probé ayer como acompañamiento para un pollo guisado y algo picante de un restaurante chino lo que parecían algas fritas y así se anunciaban en el plato. Una delicia nueva que me apresuré a conocer con más detalle. 

No son en realidad algas en la restauración occidental, sobre todo si son restaurantes de bajo precio, sino hojas verdes de col china, o espinacas, o acelgas, o simplemente col normal de hoja pero bien verde oscura siempre. No sirve verde claro.

Una vez enrolladas las hojas para facilitar el corte y picadas muy finas en tiras delgaditas, se secan bien de humedad. Debe estar la verdura bien seca y si es necesario se meten unos minutos al horno para lograrlo.

Se calienta una freidora y se meten las hojas picadas de la verdura a freír con el aceite bien caliente entre 30 y 45 segundos. Aceite de girasol. La verdura debe quedar bien tiesa y sobre todo bien verde.

Se saca la verdura picada de la freidora bien escurrida de aceite y se distribuye sobre unas bandejas con papel absorbente para que se chupe todo el aceite posible. Ahora por encima y en caliente se pone unos golpes de sal y otros algo más abundantes de azúcar, añadiendo semillas de sésamo o de pipas de girasol. El resultado debe ser casi dulce, nunca salado. Y crujiente.

Se sirven calientes y para ello es posible que las debas de tener un poco en el horno, para que no se enfríen. Deliciosas y nuevo sabor que no solo acompaña sino también sorprende. 

Menú El Asador de Aranda (de Duero) en Zaragoza

No es una entrada de publicidad aunque lo parezca, es un menú castellano que se puede tomar en muchas ciudades de España de una forma muy sencilla, sin tener que viajar, y con una calidad muy buena. Sin duda hay unos años que no he estado en este restaurante de mi ciudad, Zaragoza, pero si mantienen la misma calidad que antaño, es excelente y lo aseguro desde mi procedencia castellana.

Si amablemente alguien quiere seguir recordándome a qué sabe el cordero lechal de Aranda, asado en horno castellano, me puede invitar sin añadidos, y así lo podré contar con más detalle.

Personalmente de los entrantes me quedo con el picadillo, la morcilla y tal vez el lacón aun que no sea soriano o burgalés. Antes servían creo que bajo pedido unos riñones asados envueltos en su sebo, que eran un milagro.

De las carnes sin duda, el asado de cordero con patatas, que es una delicia. La carne debe ser aragonesa o castellana, lechal o ternasco, pues no debe saber a carne, tiene que ser jugosa pero con el sabor justo. Y algunos corderitos según la raza, tienden a saber demasiado y el cordero no es tan encantador.

Los precios son lógicos, y el servicio total no lo puedo juzgar. La bebida es aparte, y recomiendo un vino de Aranda de Duero tinto, o si te lo recomiendas por su calidad un rosado de Aranda, que a pocos gustan pero que si está bien hecho es una maravilla.

Chipirón bellamente decorado, en León

No cabe duda de que cualquier plato bien presentado gana el doble de presencia y de ganas de ser tomado, que los alimentos entran por la vista y el olor, que una buena disposición como si estuviéramos creando un diminuto cuadro de colores, ayuda a poner en valor lo que se presenta.

Es un simple chipirón maravilloso al que no le falta detalle para ser apetecible. 

Sobre una lámina fina de pan un poco de cebolla pochada y caramelizada. Sobre ella un chipirón a la plancha con un filete de ajo tostado encima. A su vera un poco de cebollino junto a una salsa de mayonesa con un ligero toque de mostaza.

Si no nos gusta la salsa, el cebollino o el ajo, todo está perfectamente separado para poder ser retirado o no tomado. 

El plato de pizarra negra ayuda a resaltar los productos presentados con un excelente entrante en un menú degustación en el Parador de León.

Jamón o pierna de cerdo jugosa, asada entera

Asar un jamón entero al horno de casa no es nada fácil. Hacerlo en un horno de leña lo es más aunque tiene unas técnicas muy claras y a veces secretas entre los cocineros que saben dominar estas técnicas, sobre todo las preparatorias para dejar la carne lista para meter al horno.

El jamón fresco de cerdo se debe maceras un día antes con diversas técnicas según cocineros. Siempre empleando licores, vinos, hierbas del campo, etc. Con estos ingredientes se hace una mezcla junto a aceite o sebo y se frota muy bien la carne durante un día entero al menos. También se emplean sistemas de inyectar dentro de la carne este adobo, y se hacen unos cortes sobre la piel para que entre bien sobre la carne todos los sabores y humedades del adobo. En algunos casos se emplea un simple vaso de brandy pero en otros se utiliza un litro de vino rancio junto a otro litro de agua y se deja en inmersión la pierna del cerdo. Siempre romero, perejil, tomillo, etc.

Tras el adobo se pone en un horno de calidad y a una temperatura no muy alta para que se pueda hacer por dentro, nunca a más de 180 grados. Aquí es fundamental tener bien pillado el tiempo de asado según el tipo de horno. Incluso a veces tapando durante un tiempo la carne con papel de aluminio para que se haga por dentro sin quemarse por fuera. Nunca debe dejarse la carne sin líquido, pues es una mezcla de asado húmedo. La humedad es fundamental para que no quede la carne seca.

Siempre debe quedar muy jugoso por dentro y muy crujiente por fuera. Y se sirve a filetes finos, a ser posible con parte de la crujiente piel. Con un puré de manzana o de patata y cebolla, encaja muy bien la presentación de la carne.

Menú de restaurante para el Día del Pilar

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Para grandes días, grandes menú de restaurante o de hogar, que cada día somos todos más trabajadores de cocina y de servicio. Veamos estos dos menú del Restaurante del Club Náutico de Zaragoza, para los días 12 y 13 de octubre de 2014.

Por 49 euros todo incluidos nos ofrecen unos menú muy completos y bien diseñados. En un entorno además maravilloso. Tras la Basílica del Pilar, junto a la orilla del Ebro, contemplando el río desde el propio comedor.

Dos platos de entrada muy bien elegidos en ambos casos, un sorbete para limpiar de sabores y dejar buena gana de cara a la carne, que como debe ser es ternasco de Aragón, carne suave, joven y con el sabor justo para que no resulte una carne excesiva.

Buen postre acompañado de café y unos vinos muy correctos. Por el precio falta una copa de cava aragonés y tal vez unas borrajas de acompañamiento en los primeros. Estamos hablando de 49 euros, aunque sea menú de fiestas y esté acompañada como en otros restaurantes de Zaragoza de una rondalla de jotas.

Gran parte de estos platos son posibles hacer en casa, no en un día de fiesta como el del Pilar, pero excepto los postres tal vez más complejos, son platos bien diseñados y posibles de recrear en el hogar.

Menú "Eucharistia" para Las Edades del Hombre 2014

Los Paradores de España y en honor de las Edades del Hombre 2014 ha preparado un menú especial del que he rescatado este ejemplar del Parador de Lerma.

 Unos aperitivos para la mesa a base de empanada de morcilla y chorizo de la zona, unas croquetas de cocido y una tostada con queso de cabra con pipas y miel.
 Tras los aperitivos una menestra de verduras de la zona con jamón de pato.
 Y de plato contundente o gallo de corral guisado con frutas secas o un bacalao confitado con verduras.
 Para postre un pastel de yema con queso de Burgos.

Todo muy castellano, basado en platos con sabores antiguos, de los que producen añoranza, y a un precio muy aceptable para el servicio que suelen dar en Paradores. No está incluido el vino, lo que tal vez nos lleva a un encarecimiento, según el caldo elegido. Pero los 23 euros es un precio lógico para una comida de estas viandas castellanas.

Menú para un día especial y festivo, a base de platos fáciles

Este fin de semana es tiempo de comidas familiares, de Fiestas del Pilar en Zaragoza o de Puente Festivo en varias otras zonas de España. Días pues para menú especial y por ello os dejo dos tipos de menú que presentan restaurantes de Zaragoza para este fin de semana. No es complicado hacerlo, a poco que se rtengan ganas de trabajar un poco.
La copa de bienvenida con un pequeño bombón de foie está muy bien para recibir. El tomate rosa con lascas de queso del Bajo Aragón un buen comienzo. El bogavante en ensalada con chipirones un encuentro con el mar para chuparse los dedos. Las paletillas de cordero o ternasco asado con patatas a lo pobre un clásico siempre de moda. El moscatel acompañando una tarta de pera o de  hojaldre de calidad un premio al cuerpo para acompañar los cafés. Vosotros mismos, lectores.

“Blue Nile special” de la cocina de Etiopía, carnes y verduras

Hoy os voy a dejar un plato de la cocina etíope que llaman Nilo Azul o Blue Nile special en la carta del restaurante Blue Nile de Birmingham y que en realidad era un Yesom Beyayinetu kasa gar con más variedades de carne.

Te sirven la bandeja —sin duda para dos o incluso para tres personas pues es bastante grande— junto a la bandeja de tortitas. Se come con la mano, no hay cubiertos como es normal en la cocina o restauración de Etiopía y de África y cuesta 25 euros.


Son carnes y verduras, sobre todo de cordero y algo de ternera y creo que pollo, ligeramente picantes y siempre muy especiadas, todas distintas y sin duda diferentes a la cocina occidental que todos conocemos. Personalmente prefiero un tenedor para poder degustar con más calma estos alimentos, aunque fuera pequeño, pero en el restaurante no supieron/quisieron dármelo.

Receta de arroz con leche muy sencillo de hacer y para novatos

Pocas cosas tan sencillas como un buen arroz con leche. En una olla normal de las que sabemos no se agarran los alimentos al fondo, ponemos un litro de leche entera a hervir. Añadimos mientras se va calentando seis cucharadas soperas de arroz redondo y seis cucharadas soperas de azúcar, bien llenas. Añadimos dos trozos de cáscara de limón sin la zona blanca para que no amargue. Y un buen trozo de canela en rama. Si empleamos medio litro de leche, pues la mitad de elementos.

En el momento en que rompa a hervir, damos unas vueltas con una cuchara para que no se pegue, y tras bajar el fuego al mínimo, justo para que hierva ligeramente, dejamos todo al fuego media hora, casi sin tener que dar vueltas en ese tiempo de cocción. El arroz se cocerá más que para una paella, debe quedar casi pasado.

A la media hora ya está el plato terminado, o casi. Ahora tenemos dos caminos. El fijo es poner unos golpes de canela en polvo por encima al poner todo el arroz con leche en una bandeja. O bien un poco de canela en polvo en los tazones o platos individuales.

El opcional y que solo se hace en algunas zonas. Batimos una yema sin clara, y ya fuera del fuego añadir la yema al arroz con leche y revolver bien todo antes de poner la canela encima como hemos comentado antes. De esta forma el arroz con leche queda algo más amarillo y cremoso.

Vigilar por si se pega algo el arroz en la olla de cocer, que depende del tipo de material de la olla, pues entonces hay inevitablemente que darle más vueltas a todo el plato de poco en poco tiempo.

Servir siempre frío, pero no helado o muy frío, y como postre tras una comida no muy potente.