Mermelada de limón siciliana y fácil de hacer

Vamos a plantearos una receta de mermelada algo distinta a las habituales, ácida pero sin pasarnos, natural y además una mermelada poco conocida en los mercados españoles aunque cada día hay más mermeladas de naranja amarga o de jengibre o de sabores fuertes, una mermelada mediterránea, que si bien podríamos llamar "Mermelada Siciliana" realmente es un producto de todo el levante español, mediterránea y compartida por todo lo que ha sido la Corona de Aragón, incluido el sur de Francia. Ideal para pan tostado en los desayunos, pero también como acompañamientos a ciertos platos de pescado o carnes, pues su toque ácido encaja muy bien con platos calientes.

Ingredientes:

12 limones

1kilo y medio de azúcar 

600 ml de agua 

Lavamos bien los limones con agua y con un estropajo quitamos las impurezas de la piel y posibles restos de productos que no deseamos y que le hubieran podido caer al limón. Que a veces llevan conservnates y eso a mi no me gusta.

Los cortamos en cuatro partes y a su vez cada parte, en rodajas muy finas.

Quitamos las pepitas. 

Ponemos todas las rodajas finas de limón en una olla y cubrimos con agua fría.

Dejamos reposar todo 24 horas.

Repetimos otras 24 horas en reposo, cambiando el agua.

Al día siguiente los cubrimos con nueva agua limpia y los ponemos a cocer durante media hora. De esta manera el limón no resultará muy fuerte de sabor, si eres de los que te gusta el limón en todo su esplendor, con un día a remojo te puede servir. Pero hay que tener en cuenta que lo que más amarga es la parte blanca de la piel, y en esta receta se deja, por lo que los dos días de agua sería la primera opción antes de saber si te va a gustar amarga o no.

Sacamos a continuación todas las rodajas de limón y tiramos el agua que ha servido para que perdieran acidez y fuerza de amargor.

En otra olla ponemos 600 ml de agua, y kilo y medio de azúcar. Hacemos un sirope. Cuando este acabado echamos al sirope las rodajas finas de limón que han estado en reposo los dos días.

Cocemos todo durante 45 minutos, removiendo de vez en cuando. Al acabar el tiempo, llenamos los botes de cristal bien limpios, los cerramos y los ponemos boca abajo para que salga el aire y para una conservación mejor en el tiempo.

Vicenta Pardo - Murciana y amante de las naranjas amargas y los limones naturales y gordos