Cuatro desayunos contundentes, casi almuerzos

Escribía ayer de los diferentes tipos de brunch como nueva moda que se quiere poner en los restaurantes españoles, pisando entre el almuerzo o desayuno y la comida. 

El brinco es clásico almuerzo español de toda la vida, de unos huevos fritos con chorizo o longaniza y jamón con patatas fritas. Eso es un brunch muy español y nadie lo va pregonando por todos los sitios finos del planeta. A ser posible con bota de tinto y caramillo de postre.

Hoy os dejo unos ejemplos de desayunos o para ser más finos en el argot internacional, breakfasts, que no son el clásico café con leche y tostadas con aceite o mermelada. Son tiempos en los que si le ponemos nombres a las cosas clásicas, parecen nuevas. El caso es introducir nuevos nombres, y no nuevos contenidos.

No viene explicado el desayuno andaluz con pan de mollete y manteca colorá o pate o tomate y un filete de jamón serrano. Lo dejaremos para otro día.