Cenas simpáticas para las noches de verano

Es temporada de noches al viento, de veladas nocturnas alrededor de buenos platos. Barbacoas con chorizos y morcillas, pancetas o ternasco, patatas asadas con cebollas o unas sardinas, pueden ser un complemento a buenos vinos y ensaladas de tomate bien colorado.

Pero también podemos terminar el día con asados de paletillas o con platos algo más extraños como los fáciles cous cous en frío tipo ensalada (tabulés), unos platos de pinchos de la casa con color y frescura, unos quesos potentes que sorprendan y de diferentes zonas o unos ahumados envueltos en distintas presentaciones. Sin olvidar que unos tacos de bonito en conserva con pimientos del piquillo pasados por la sartén junto a unas láminas de cebolla están de muerte. Si presentamos unas pollos o perdices o codornices o conejo en escabeche también quedaremos bien, incluso con una migas a la pastora o si tienes más arrestos una paella como los “guiris” con sangría y todo. Eso si, haz una paella como dios manda y una sangría de verdad pero dando la oportunidad a quien tenga más estómago exigente de que beba un buen vino blando del Somontano.

En estas cenas lo importante son las compañías, los amigos y las conversaciones. Incluso la música y la luz de las velas. Y terminar con cava bien fresco es una opción lógica. Disfrutar.