Croquetas de jamón con mermelada de frutos rojos


Las croquetas es un plato muy sencillo, de aprovechamiento en muchos casos, pero a su vez complejo si deseamos sacarle el máximo provecho a un plato muy antiguo que puede estar maravilloso o ser un ladrillo. Una croqueta puede ser un bombón salado y sabroso, o un cemento incomible.

Estas que vemos son croquetas de jamón, de las que hay centenares de recetas en todos los sitios. Un buen jamón no muy seco, una bechamel suave y muy jugosa, una masa final suave, casi líquida, sabrosa y esperando ser rebozada en un pan rallado grueso para freírse en un aceite bien caliente. Yo prefiero siempre para estos casos un aceite de oliva no muy potente.

Luego en el plato se pone una mancha de mermelada de frutos secos, sobre ella se coloca la croqueta para que no baile, encima otra gota de la misma mermelada y una ramita de cebollino para darle frescor. No es necesario nada más para quedar muy bien, si estén recién hechas. Crujientes por fuera y casi líquidas por dentro.