Consejos si comes mucho de restaurante

¿Qué podríamos comer si tenemos que comer fuera de casa y en restaurante con excesiva normalidad, y que fuera sano y no me afectara en exceso a la salud? Vamos a revisar algunos consejos, para ayudarte en esta práctica no muy correcta, pero muchas veces inevitalbe según el tipo de trabajo que tengamos.

Si hay que terminar tomando un aperitivo, intenta engañarte un poco. No tomes fritos, son mortales por las grasas, elija si puedes aceitunas, mejillones, champiñones, pepinillos o unas anchoas. Mejor un poco de vino o cerveza que una bebida excesivamente azucarada. Puedes tomar un bitter o un agua con gas, que te ayudará a sentirse lleno.

Para primer plato las verduras son ideales, Las legumbres también aunque en según qué lugares van acompañadas de un exceso de grasa. Una ensalada con algunos toques especiales también encaja. Y si hay que cambiar para variar, un arroz encaja mejor que una pasta y mucho mejor que un plato de embutidos.

Para segundo plato, uno que sea suave. Un pescado, una carne no muy contundente y a la plancha, algo no muy condimentado y sin que sea un guiso feroz. No tomes patatas fritas y elije ensalada que la puedes solicitar a cambio de las patatas, una vez que haces el pedido. No es muy recomendable los huevos. Mejor platos al vapor, a la plancha, que guisados. No tomes la piel de las aves.

De postre además de las frutas pueden ser recomendables los lácteos no muy pesados. Una cuajada, un queso fresco, un yogur, un sorbete, un helado.  Nada de natas. No tomes mucho pan con la comida, mejor si es posible muy poco. Una copa de vino si no se ha tomado alcohol en el aperitivo está bien. No tomes licores y sí una taza de café pero sin abusar o cortado, para que no sea un irritante gástrico.

Y recuerda siempre. Es mejor poco y bueno, que mucho y con dudas. Si comes fuera de casa, asegúrate de la limpieza y de que los alimentos sean frescos  y recién cocinados. Sentido común y mejor un poco de hambre que un abuso.