Chuletas de Cordero de Cuenca, mal cortadas

La forma de vender y comprar juega con muchas variables. Los consumidores estamos de muchas formas en inferioridad de podernos defender, pues el vendedor siempre tiene la respuesta de que si no te gusta, no lo compres. No te obligan a comprar. Y es cierto. A que hay que estar muy espabilados.

Esta carne de cordero la vende Sabeco y está empaquetada en Cárnicas Loriente Piqueras de Cuenca. Bien. Criada y sacrificada en España, como pone por obligación la etiqueta. Bien. A un precio de 12,90 euros el kilo de chuleta de palo o riñonada. Normal. 

Pero el error viene cuando al abrir el paquete observamos que además de la chuleta de palo, que se debería acabar en la zona que he marcado en rojo, al realizar el despiece de la parte del cordero, no se ha separado lo que se llama “bajos del cordero” esa zona de la costilla final, que se vende a un precio mucho más bajo y que se emplea para guisos o para parrilla.

Nadie engaña, pues el paquete está a la luz de observar, comprar o no. Pero hay muchos consumidores que no saben que esa parte del cordero, más barata, se vende por separado y nunca con las chuletas de palo. Pagas a 12,90 lo que no debería superar los 7 euros. Y además que al final te presentan unas chuletas con un lomo correcto pero enormes de largas, con el final de la costilla más duro que el resto, por el tipo de carne. Y a un precio excesivo por el total de la carne que te meten en el paquete.